Calafell es uno de los pueblos más bonitos y agradables de la Costa Dorada.
Con su playa de más de 5 km de largo, de arena dorada y fina. Y un paseo marítimo sin coches, con gran oferta de comercio y restauración.
Calafell es un municipio turístico donde hay una amplia variedad de propuestas de ocio y entretenimiento durante todo el año. El turismo en Calafell radica sobre todo en la oferta gastronómica, especialmente en los productos de la zona como el pescado, el vino y el aceite; también durante la época de verano tiene gran cantidad de ofertas de ocio marino, como clases de vela ligera, windsurf y padelsurf.
Asimismo, dispone de un centro histórico medieval coronado por el castillo de Calafell y un poblado ibérico único.
Disponemos de un clima excepcional, con 300 días de sol al año, que propició la ubicación de las colonias Vilamar, el antiguo Sanatorio de Sant Joan de Déu (actual hotel Le Méridien RA) y la primera urbanización europea con modelo de ciudad jardín (Segur de Calafell) . Reconocidos como municipio turístico de la demarcación de Tarragona desde 2008 (con Cambrils y Salou).
Calafell disfruta de más de cinco kilómetros lineales e ininterrumpidos de playa , con una fachada marítima prácticamente única en Cataluña que se divide en tres playas: la Playa de Calafell, que coincide con el núcleo de la Playa; la Playa de Segur, que coincide con el frente marítimo del núcleo de Segur de Calafell; y la Playa de L’Estany-Mas Mel, situada delante de los dos barrios que llevan estos nombres.
Las playas de Calafell son idóneas para el turismo familiar . De muy antiguo, Calafell ha sido conocido como “la playa del biberón”, por la calidad de la arena y del agua, por la tranquilidad del mar y por la suavidad de las pendientes cuando se entra en el mar.
El agua tiene propiedades salutíferas, ya que tiene una concentración de yodo cinco veces superiores a la normal en el mar. Entre 1926 y 1968 funcionó en la zona un sanatorio, el Sanatorio Marítimo de San Juan de Dios, que curaba los tuberculosos gracias a este don de la naturaleza.
La arena de las playas de Calafell es famosa por su finura. La regeneración del litoral realizada los años 1993 y 1994 recuperó una playa prácticamente desaparecida por la erosión, a pesar del efecto negativo de la arena aportada, de inferior calidad. Diez años después y gracias a las aportaciones efectuadas con arena dragada del antiguo puerto de Segur y a las continuas atenciones, la playa ha recuperado en buena parte su fisonomía y calidad originales.
